La amistad es eterna, pero no por la constancia, ni por lo intensa, ni por lo frecuente... La amistad es eterna porque no existe el tiempo para ella, es incondicional, porque no pasa nada si no estamos, pero estamos presentes en el corazón, porque ahí está lo auténtico. Y el día que se encuentran los caminos, tampoco importa cuando sea, ni cómo sea, porque SIEMPRE estamos "ahí", en la esencia de ese vínculo. Un vínculo que no se sabe bien cómo surgió, pero surgió y está.... Y perdura... Y se mantiene... Sin que exista el tiempo.
J.G.T. Agosto 2017.